El pensamiento extravertido (Te) sirve como la función dominante o auxiliar para los INTJ, ENTJ, ISTJ, y ESTJs. Los TJ se esfuerzan
para estructurar racionalmente el orden y controlar el mundo exterior. Son sistemáticos, metódicos, deliberados y estratégicos en su enfoque.
Proceden con cuidado y lentamente de cara para evitar los obstáculos potenciales y para prepararse para las contingencias.
El pensamiento extravertido (Te) implica juicios basados en el pensamiento, incorporando hechos, datos, u otras consideraciones objetivas.
A través de la lente impersonal y objetiva de Te, el mundo se convierte en una máquina gigante, un sistema de partes interrelacionadas
que funciona de manera predecible de acuerdo con las leyes de causa y efecto.
Te rivaliza con la sensación introvertida (Si) con respecto a su capacidad para almacenar y recuperar información objetiva. Te almacena y
preserva los datos y la información en su forma original, permitiendo a los INTJ, ENTJ, y STJs recordar hechos, fechas, nombres,
números y procedimientos con una impresionante precisión. Los INTP, por el contrario, se basan en el pensamiento introvertido (Ti), que es más
fluido en la naturaleza y menos experto con respecto a la retención de hecho.
Un enfoque objetivo basado en pensamiento extravertido conlleva generalmente mediciones cuantitativas y normas. Nunca vago o ambiguo, Te
emplea definiciones claras, políticas, planes y procedimientos. Explica detenidamente cómo llegar de aquí para allá, utilizando
tanto como mapas, direcciones, y etiquetas según sea apropiado. El mundo moderno, caracterizado por un sistema extenso de leyes y
burocracia, podría ser visto como la descendencia de un Te no reconocido.
Inspirado por su pensamiento extravertido, los INTJ y ENTJ son campeones del desarrollo y la utilización de objetivos claros y medibles.
Después de recibir una visión panoramica general de su Ni, utilizan su Te convirtiendo un conjunto de objetivos mensurables para delinear
los pasos y estrategias para su realización.